Aumentan significativamente desde la entrada del nuevo Reglamento europeo de Protección de datos.
Desde entonces según datos que ha facilitado la agencia española que tiene competencias en esta materia, el número de reclamaciones sobre Protección de datos en España ya ha alcanzado las 5.200, un 36% más que las que se habían presentado entre finales de mayo y mediados de octubre de 2017.
El aumento de este tipo de reclamaciones durante 2018 no se ha notado únicamente desde la entrada en vigor de esta nueva normativa, ya que entre el pasado mes de enero y el 25 de mayo ya habían registrado un aumento interanual del 23%. Pero ha sido desde que la RGPD comenzó su periodo de vigencia cuando más han crecido. Tanto, que hasta principios de mes de septiembre ya registraban una subida del 33% con respecto al periodo comprendido entre finales de mayo y primeros de septiembre de 2017.
Entre los asuntos sobre los que más reclamaciones presentan en España los ciudadanos están relacionados con temas muy diversos. Entre ellos, con las deudas, con la inclusión de las personas en ficheros de morosos, la publicidad y la prospección comercial, la videovigilancia y el correo no deseado.
La normativa europea RGPD, que debe cumplirse en todos los países de la UE, incorpora nuevos requisitos de privacidad que las empresas deben cumplir cuando traten datos de terceros o los vendan a otras empresas. Y prácticamente todo lo que hagan debe contar con el consentimiento expreso de la persona cuyos datos se recopilen. Su principal objetivo es garantizar a los ciudadanos que sus datos están más protegidos y que cuentan con más privacidad.
Aunque es una directiva común para los estados miembros de la UE, el RGPD debe adaptarse a las particularidades de cada país.
En España se acaba de aprobar el Proyecto de ley que adapta las normas españolas a dicha normativa. Ahora, la normativa debe pasar al Senado, como parte de la tramitación parlamentaria de su adaptación, un proceso que se espera que haya concluido antes de que finalice este año 2018. Durante la tramitación de su adaptación, la RGPD ha experimentado diversos cambios, para lo que se han presentado varias enmiendas al texto inicial.
Gracias a esto, el texto que ha sido aprobado regula, además de un mayor nivel de protección y control de datos por parte de los usuarios, aspectos como el testamento digital, la desconexión digital laboral o la intimidad de los trabajadores ante la presencia de videocámaras en las empresas. Pero también la protección de los menores que utilizan Internet. Además, garantiza el acceso universal a la Red y la portabilidad de los datos personales.
